(Rosa Centifolia), (Rosa Damascena ), (Rosa Gallica).
Aceite esencial de Rosas
Extraída por utilización del método de enfleurage, es uno de los aceites considerados como absolutos, dada su concentración.
Presentará una coloración desde un pardo rojizo profundo a un naranja verdoso, dependiendo de la variedad que se utilice, siendo de un poder perfumante muy intenso, por lo que deberá usarse con moderación.
Tradicionalmente así como la rosa es considerada la reina de las flores, el aceite de rosa es considerada la reina entre los aceites esenciales.
Recomendada para los trastornos vinculados al aparato reproductor femenino, trastornos en útero y ovarios, teniendo cualidades purificadoras, tonificadoras y reguladoras, por ejemplo cuando hay pérdida de tonicidad en el músculo uterino o para mujeres con tendencia al aborto, además se sugiere la combinación con ejercicios indicados especialmente para estos casos.
- Irregularidades del ciclo menstrual, tensión premenstrual, depresión o tristeza.
- Antidepresivo suave pero potente, dada su indiscutible relación con lo femenino es recomendado cuando el trastorno emocional se encuentra relacionado con la sexualidad femenina o el ciclo reproductor.
- Depresión post parto o por ruptura de una relación.
- Es un aceite recomendado para el cuidado de la piel, especialmente indicado para pieles secas sensibles o envejecidas.
- Tónico de la circulación, la digestión y el sistema nervioso, aunque suele emplearse poco para estos fines debido a su costo elevado.
El agua de rosas es un producto mas económico, aunque si es de buena calidad mantendrá las propiedades originales de la rosa, pudiendo utilizarla como calmante, antiséptica y tonificante para la piel, asimismo es un efectivo antiséptico para las infecciones de los ojos.
Precauciones: No utilizar durante el embarazo ya que es un tónico uterino.
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