El sueño siempre fue destacado como muy importante para el cerebro, mejorando memoria, concentración y humor. También se destaca la mejora del sistema inmunitario, combate el envejecimiento prematuro. Pero algo muy importante constatado en la Universidad de Chicago en EE.UU, es que cuantas menos horas duerme una persona, más riesgo tiene de sufrir un infarto, así como de formar calcificación en las arterias, con las consecuencias pertinentes.
Otros estudios han constatado que dormir suficiente evita el aumento de peso, pues la falta cotidiana de sueño provoca un aumento mayor de lo normal de glucosa en sangre.
También se constató que la falta de sueño provoca que los niveles de cortisol se eleven, es la conocida hormona del estrés, secretada por las suprarrenales, favorece también el almacenamiento de grasa en nuestro cuerpo.
Se afecta también la glándula Tiroides, provocando en muchos casos hipertensión.
Evidentemente dormir adecuadamente, nos da mejor calidad de vida y también salud. La cantidad de horas es variable en cada persona, oscila entre 7 a 9 horas.
Existen afecciones que perjudican tener un sueño tranquilo y reparador, como por ej. el Bruxismo, que consiste en rechinar los dientes estando dormidos, para lo cual existen productos naturales para regularizar esta afección. Lo mismo ocurre con la apnea nocturna, que es la interrupción de la respiración mientras dormimos. Estas dos afecciones provocan un sueño no reparador, ocasionando durante el día una somnolencia casi permanente, perjudicando tanto la actividad mental como física.
La siesta puede llegar a ser necesaria para muchas personas, en especial adultos mayores. La temperatura corporal desciende en las primeras horas de la tarde, entre 14 y 17 horas aproximadamente. Allí es donde se recomienda realizar este descanso que no debe superar la hora de duración. Este descanso aporta más energía para el resto del día.
Estudios científicos han demostrado que la noche, antes de dormir, es la hora ideal para leer. La realización de tareas creativas es en las primeras horas de la mañana.
Cuando la persona sufre de insomnios crónicos y consume mucho tiempo psicofármacos, estos le hacen dormir, pero pueden tener una serie de efectos secundarios. El primero es crear dependencia, puede generar pérdida de memoria, decaimiento al levantarse y el ingreso de un círculo vicioso del cual es difícil salir.
Para dejar esta medicación requiere tiempo, paciencia y la indicación de un médico.
Consejos para el buen dormir:
- Tener actividad física durante el día, puede ser salir a caminar.
- Acostarse más o menos a la misma hora diariamente.
- Evitar mirar televisión en la cama.
- Procurar lograr un dormitorio silencioso y oscuro.
- Evitar después de las seis de la tarde consumir bebidas que contengan cafeína (mate, bebidas cola, té, entre otras).
- También evitar el alcohol después de las seis de la tarde.
- Evitar cenas pesadas, como carnes, fiambre, fritos, y consumirlas al menos 2 horas antes de dormir.