El resveratrol es un potente antioxidante de origen natural. Se trata de un compuesto que fue descubierto por primera vez en la planta de la vid, y su mayor concentración se encuentra en la piel de la uva negra, también lo podemos ubicar en alimentos como nueces, arándanos o el vino tinto.
El resveratrol se encarga de aumentar las defensas de nuestra piel y neutralizar los radicales libres que provienen de los rayos UVB y de la contaminación ambiental, reparando el daño que estos ocasionan. También promueve la síntesis de colágeno, por lo que presenta un efecto rejuvenecedor y regenerador de la piel, y debido a sus propiedades antiinflamatorias, previene el envejecimiento prematuro de la misma.
Además, regula los mecanismos homeostáticos energéticos celulares, que se traduce en un ahorro de energía por parte de las células, lo que las hace más longevas.
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